Hay muchas formas de cambiar la realidad, desde la política, desde el reclamo, desde el barrio. Pero siempre hay que tener una base, una formación y esa es la cultura, lo que podemos aprender para saber donde estamos parados, para lograr ser libres. Pero como el conocimiento nos hace responsables, debemos transmitir la cultura a los que no tienen acceso a estos conocimientos, solo así lograremos cambiar algo.
La cultura no suele ser la prioridad de los gobiernos, y si lo es, seguramente distribuyen una forma recortada de la cultura. Por eso son tan necesarios los centros culturales no gubernamentales, formados por jóvenes y administrados sin ataduras ni verticalidades.
Este es el espacio que tratamos de llenar, un vacío cultural en nuestra ciudad y en la zona. Un lugar verdaderamente público donde todos son bienvenidos, y quien quiera participar será escuchado.
Así que, sean bienvenidos a este espacio cultural.
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